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Las constructoras prevén que la escasez de mano de obra y la subida de los materiales aumenten los costes un 8%

Los profesionales del sector muestran más preocupación por las dificultades para encontrar trabajadores que por la falta de materias primas, según una encuesta

La construcción avanza con paso firme conforme evoluciona la pandemia y se va aclarando el horizonte. Pero eso no impide que el sector vislumbre grandes nubarrones que amenazan su futuro y que están poniendo ya en dificultades su presente. Así se desprende de una encuesta que periódicamente elaboran la Royal Institution of Chartered Surveyors (RICS, una asociación profesional internacional que emite certificados de buenas prácticas en el sector inmobiliario) y el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España. En su última edición, relativa al tercer trimestre de este año, el índice de la actividad de construcción da un salto de nueve puntos respecto al anterior y presenta un balance positivo de 26 puntos. Pero, a la vez, las empresas y profesionales consultados creen que los costes de construcción van a elevarse un 8% en un contexto de escasez de mano de obra y de materiales.

El índice de actividad mide la diferencia entre las empresas que dicen tener más carga de trabajo que antes y las que tienen menos. Se mantuvo en negativo todo el año pasado y también en el primer trimestre de 2021 hasta que, ya entre abril y junio, viró hacia tendencia positiva. Ahora esta aumenta, con lo que España se acerca a la media europea (por encima de 30 puntos, pero invariable respecto al trimestre anterior).

El indicador, además, ofrece datos desglosados entre varios subsectores de la actividad constructiva. El más optimista, una vez más, es el de las empresas que edifican viviendas (49 puntos), aunque retrocede ligeramente respecto al trimestre anterior (55 puntos). Las compañías centradas en infraestructuras, por el contrario, ofrecen un balance positivo de solo 3 puntos (por 11 entre abril y junio). Entre ambas, el sector privado no residencial experimentó un aumento de la actividad durante el verano y acabó con un saldo positivo de 38 enteros.

Optimismo en el sector

Con las luces cortas puestas, la encuesta también pregunta a esas mismas empresas si esperan que su carga de trabajo aumente o disminuya en los próximos 12 meses. La respuesta da cuenta de una percepción optimista en todo el sector: el balance es positivo en 41 puntos para el conjunto de compañías. Las dedicadas a viviendas, de nuevo, se sitúan en cabeza con 67 puntos. Las de infraestructuras (25 puntos) y las que construyen otro tipo de edificios no residenciales (23 puntos) quedan prácticamente empatadas.

Pero esas buenas perspectivas en su futuro más inmediato no significan que el sector no perciba algunas amenazas. Para Simon Rubinsohm, economista jefe de RICS, “no es de extrañar que las expectativas del sector sigan mostrando una tendencia fuertemente positiva”, como resultado del desembolso de los fondos de recuperación europeos. Pero advierte, al mismo tiempo, de que “se intensifica la preocupación sobre cómo afectarán el creciente coste de los materiales y la escasez de mano de obra”. Esta última será determinante porque “la industria tendrá que aumentar sus plantillas para hacer frente a un mayor nivel de demanda”.

Cuando se pregunta a las empresas españolas qué factores frenan su actividad, alrededor de cuatro de cada cinco mencionan la escasez de mano de obra y la falta de capacitación de la misma. Es una preocupación que crece (71% en el segundo trimestre) y que se une al suplicio de la ruptura de las cadenas internacionales de suministro: la carestía de los materiales y la escasez de los mismos son los siguientes problemas más citados (más del 70%).

De ello se desprende que los costes de materiales y mano de obra, así como los precios de licitación, vayan a crecer, según responden las empresas y profesionales consultados. Como resultado de todo ello, se estima que los costes de construcción aumentarán un 8% en los meses venideros. Pero a la vez las compañías mantienen una expectativa de crecimiento de sus beneficios, con un saldo positivo de dos puntos. Cuando se les pregunta en presente si sus márgenes han aumentado, el balance del tercer trimestre es negativo en 14 puntos.

Fuente: https://elpais.com/