La construcción crea 170.000 empleos y pierde 85.000 parados desde el peor momento de la pandemia

La construcción ya mira con distancia la crisis del coronavirus. Y para darse cuenta de ello basta repasar la evolución del mercado laboral: el paro está en mínimos de casi dos años, mientras que los ocupados se encuentran en los niveles más altos desde 2011.

Según los datos del Ministerio de Trabajo, a cierre de septiembre había 259.300 personas desempleadas ligadas al sector, la cifra más baja desde noviembre de 2019. Desde abril de 2020, el pico de la pandemia y coincidiendo con el parón total de la actividad económica, el número de parados en el ladrillo se ha reducido en 85.141 personas.

Por otro lado, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones sitúa el número de afiliados en la actividad en 1,297 millones, tras sumar siete meses consecutivos de incrementos interanualesA pesar de que la cifra está ligeramente por debajo de las registradas en junio y julio (cuando rebasó 1,31 millones), se mantiene en zona de máximos de la última década. En la serie histórica habría que remontarse al año 2011 para ver un número más alto de afiliados al sistema.

En el último año y medio, coincidiendo con el punto álgido de la crisis del coronavirus, el ladrillo ha ganado 169.547 ocupados.

“Los datos del mercado laboral en la construcción confirman, un mes más, el buen momento que atraviesa el sector y su relevancia como motor de la recuperación económica. Demuestranuna tendencia estable y constante de crecimiento”, sostiene Pedro Fernández, presidente de la Construcción (CNC) y de la Fundación Laboral de la Construcción (FLC).

En esa misma línea, Javier Blasco, director de Adecco Group Institute, recuerda que el sector de la construcción viene manteniendo un buen comportamiento en los últimos meses, mejor que los de otros sectores en términos de afiliación.

Y de cara a los próximos meses todo apunta a que la tendencia se mantendrá, gracias principalmente al impulso de los fondos Next Generation EU. La rehabilitación de viviendas y la regeneración urbana, de hecho, cuentan con 6.820 millones de euros de presupuesto, lo que le convierte en la segunda partida más cuantiosa de todo el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que ha aprobado el Gobierno.

Como apunta Blasco, “la previsión es que acabemos el segundo semestre de 2021 con un crecimiento del sector en torno al 5,5%, y del 6% en 2022, por lo que la vuelta las cifras prepandemia se anticipan a 2022”.

Las previsiones del Gobierno apuntan a que los fondos europeos permitirán crear unos 180.000 empleos ligados a la rehabilitación de vivienda. Sin embargo, Blasco puntualiza que “la materialización de los fondos Next Generation va a exigir un especial esfuerzo (en verano en España sólo se había alcanzado el 5% de ejecución de los proyectos con carácter global), a diferencia de países como Italia o Francia, donde hay planes públicos de rehabilitación que están dinamizando el acceso y consecución de estos proyectos”.

Faltan trabajadores en la construcción

De hecho, la patronal insiste en que una de las principales amenazas para el sector es la falta de mano de obra, principalmente cualificada. Según sus estimaciones, “la construcción necesita alrededor de 700.000 trabajadores para cumplir con la hoja de ruta prevista con la llegada de los fondos europeos, que podría disparar el número de ocupados hasta los dos millones”, detalla Fernández.

Tanto la patronal del sector como los sindicatos afirman que el ladrillo es una alternativa laboral para todas aquellas personas que no tienen trabajo o que buscan un cambio de rumbo profesional, especialmente para los jóvenes, y que es un sector resiliente, atractivo y moderno que va a ser determinante en los próximos años para la economía, ya que canalizará de forma directa o indirecta el 70% de los fondos que van a llegar de Europa. Además, recalca el papel de la Fundación Laboral de la Construcción, que forma a unos 90.000 trabajadores al año y podría llegar a duplicar su capacidad si es necesario.

En este contexto, añade el presidente de la CNC, “mejorar la formación y cualificación de los trabajadores de la construcción es uno de los principales objetivos, así como el de atraer -sobre todo- a jóvenes y mujeres; lo que resulta posible gracias a la implementación que, poco a poco, se está haciendo en el sector de las nuevas tecnologías”.

 

Fuente: idealista.com