Las exigencias de los fabricantes de equipos originales (OEM) en cuanto a la descarbonización y el cumplimiento de normativas como la CSRD no son tendencias futuras; son requisitos empresariales actuales.
En este contexto, la innovación no consiste en encontrar simples sustitutos, sino en identificar soluciones de ingeniería que ofrezcan una ventaja competitiva tangible. Hoy quiero analizar un caso de negocio específico que ilustra cómo una decisión estratégica en la formulación puede tener un impacto radical en la rentabilidad, el rendimiento y el posicionamiento en el mercado.
Consideremos una planta de producción de pastillas de freno, un escenario familiar para muchos. Esta planta consume 300 toneladas de fibra de acero al año para sus formulaciones «Low Steel». En estas formulaciones, la fibra de acero suele representar alrededor del 10 % en peso y el 25 % en volumen del material de fricción.
La propuesta de ingeniería es la siguiente: sustituir el 50 % del volumen de dicha fibra de acero por r0_vein C, un aditivo funcional de alto rendimiento derivado de la economía circular.
La clave aquí es la sustitución por volumen, una decisión técnica basada en las diferentes densidades de los materiales:
Con este cambio, no solo estamos intercambiando un material por otro, sino que estamos rediseñando la composición de la pastilla para obtener una serie de ventajas competitivas.
Desde la perspectiva del fabricante, esta sustitución se traduce en tres pilares de valor que impactan directamente en el negocio, comenzando por la gestión de las materias primas.
Desde la perspectiva de las materias primas, el beneficio económico es inmediato. Al reemplazar el 50% del volumen de la fibra de acero, la menor densidad de r0_vein C resulta en una reducción significativa en la masa total del componente fibroso necesario.
La sustitución de 150 toneladas de acero virgen por un material de segunda vida como r0_vein C tiene un impacto ambiental enorme.
Al adoptar materiales de la economía circular, la empresa no solo responde a las demandas actuales, sino que también se anticipa a las futuras regulaciones (ESPR, DPP), garantizando la competitividad del producto a largo plazo.
Si bien el ahorro en materias primas es considerable, el verdadero valor de ingeniería se materializa en el producto final. En un material de fricción estándar (disco), donde la fibra de acero representa aproximadamente el 10 % del peso, esta reformulación ofrece mejoras significativas.
Al sustituir la mitad del volumen de la fibra de acero, logramos una notable reducción del 18 % en el peso del componente fibroso de cada pastilla. Esto se traduce directamente en un producto final más ligero, reduciendo el propio material de fricción casi un 2 %.
Esta reducción de peso constante, aunque aparentemente pequeña por unidad, representa un impacto acumulativo sustancial en una línea de producción que fabrica millones de pastillas al año. Contribuye de forma directa y eficiente al objetivo crucial de la industria automotriz de aligerar los vehículos, esencial para mejorar la eficiencia y la autonomía generales.
«Durante años, hemos tratado los cambios de formulación como ajustes graduales. Lo que estos datos muestran es un cambio de paradigma. Al sustituir estratégicamente la fibra de acero por un aditivo funcional como r0_vein C, no solo estamos modificando una fórmula; estamos mejorando fundamentalmente el producto final. Ofrecemos una pastilla de freno más ligera, sostenible y rentable sin comprometer el rendimiento. Este es el tipo de innovación multifacética que demanda el mercado».
Como muestran los datos, la integración de r0_vein C no es un simple cambio de materia prima. Es una mejora tecnológica integral del producto.
Desde una perspectiva comercial, el resultado es una pastilla de freno superior que se puede fabricar a un menor coste (gracias al ahorro en el componente fibroso), con una propuesta de valor de sostenibilidad inigualable y un rendimiento técnico mejorado gracias a la reducción de peso. Esta es la vía más eficiente y estratégica para cualquier fabricante que busque no solo competir, sino liderar la nueva era de la industria de la fricción.